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Capítulo 13 - La Doctrina de los Acontecimientos Postreros

Esta doctrina bíblica se encuentra también en el área de la escatología, o doctrina de "las últimas cosas" (véase el Capítulo XII). La palabra "escatología" viene de ésca­ton, "los últimos días" o "las últimas cosas" y logos, "estudio o discurso acerca de algún asunto." La segunda venida de Cristo, la resurrección, el juicio y el destino eterno, están incluidos en la escatología.

XII. LA RESURRECCION, EL JUICIO Y EL DESTINO

Creemos en la resurrección de los muertos, que los cuer­pos tanto de los justos como de los injustos, serán resucita­dos y unidos con sus espíritus-"los que hicieron bien saldrán a resurrección de vida, mas los que hicieron mal, a resurrec­ción de condenación."

Creemos en el juicio futuro en el cual todo hombre compa­recerá delante de Dios para ser juzgado según sus hechos en esta vida.

Creemos que a todos los que logran salvarse por creer en Jesucristo nuestro Señor y seguirle obedientemente, se les asegura una vida gloriosa y eterna; y que los finalmente im­penitentes sufrirán eternalmente en el infierno.

Los diversos asuntos incluidos en este artículo son:

1.          La vida consciente después de la muerte

2.          La resurrección de los muertos

3.          El juicio final

4.          El cielo

5.          El infierno

1.        La Vida Consciente Después de la Muerte

Algunos han enseñado la doctrina que se conoce con el nombre de "el sueño del alma". Al leer lo que dicen las Escrituras acerca de que el cuerpo "duerme" en el polvo de la tierra, han llegado a la conclusión de que eso significa que no hay existencia consciente del alma o del espíritu del hombre entre la muerte y la resurrección. Los siguien­tes pasajes bíblicos nos demuestran que esta deducción es equivocada.

FUENTES BIBLICAS

Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás con­migo en el paraíso (Lucas 23:43).

Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia. Mas si el vivir en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger. Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor; pero quedar en la carne es más necesario por causa de vosotros. (Filipenses 1:21-24).

Véase también Isaías 14:4-11; Mateo 22:31-33; Lucas 16:19-31; II Corintios 5:1-8; I Tesalonicenses 4:14; 5:9-10.

Tanto Lázaro como el rico estaban conscientes des­pués de la muerte. Pablo expresó la convicción de que en la vida o en la muerte, él estaría seguro de la presencia de Cristo.

PARA SU CONSIDERACION

1.          ¿Qué luz arroja sobre este asunto la promesa que Jesús le hizo al ladrón mo­ribundo

2.          ¿Cómo interpretaría usted las declaraciones de que los muertos hablan al rey de Babilonia cuando él es arrojado entre ellos y que Dios es Dios de vivos y al mismo tiempo lo es también de Abraham, Isaac y Jacob

2.        La Resurrección de los Muertos

La resurrección de los muertos se menciona en el An­tiguo Testamento y es claramente enseñada en el Nuevo Testamento. Cuando morimos, el presente cuerpo físico vuelve al polvo del cual fuimos originalmente creados. Semejante a una semilla, y por el poder de Dios, nuestro cuerpo será transformado en un cuerpo que al mismo tiem­po será distinto y sin embargo que tendrá continuidad con el actual organismo físico.

FUENTES BIBLICAS

Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! Porque tu rocío es cual rocío de hortalizas, y la tierra dará sus muertos (Isaías 26:19).

No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación (Juan 5:28-29).

Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros (Romanos 8:11).

Véase también Job 19:25-27; Ezequiel 37:1-14; Daniel 12:2-3; Mateo 22:23-33; Lucas 14:14; Juan 11:23-27; Hechos 17:30-32; 1 Corintios 15:20-24; 15:35-58; Filipenses 3:9-12, 20-21; 1 Tesaloni­censes 4:13-18; Hebreos 6:1-2; 11:35; Apocalipsis 20:5-6.

La Biblia reconoce un estado intermedio en el cual el alma viviente y consciente es separada del cuerpo después de la muerte física. Sin embargo, también enseña que el estado eterno no es una inmortalidad indefinida, separada del cuerpo. La resurrección asegura la continuidad de lo temporal y lo eterno.

PARA SU CONSIDERACION

1.          ¿Qué luz sobre la re­surrección arrojan los rela­tos de las apariciones de Cristo a sus discípulos des­pués de la primera Pascua de Resurrección (Mateo 28; Marcos 16; Lucas 24; Juan 20-21; Hechos 1:1-11).

2.          ¿Qué está implicado en la comparación que Pa­blo hace entre la "semilla" y la planta resultante, en I Corintios 15

3.        El Juicio Final

Después de la resurrección general, todos serán lla­mados ante el juicio de Dios para dar cuenta de sus hechos en esta vida. Algunos hacen distinción entre "el tribunal de Cristo" y el juicio final. Otros consideran ambos even­tos como simultáneos.

FUENTES BIBLICAS

Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta igno­rancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos (Hechos 17:30-31).

Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo (II Co­rintios 5:10).

Véase también Mateo 25:31-46; Juan 5:21-27; Hechos 10:39-42; Romanos 2:5-12; 1 Corintios 4:5; II Timoteo 4:1-8; Hebreos 9:27-28; 1 Pedro 4:3-5; Apocalipsis 11:18; 20:11-13.

Si se considera Lucas 16:19-26 en conexión con Hechos 13:46, pareciera demostrar que la gente sella su propio destino para el cielo o el infierno aun antes del juicio final. Esto es por su respuesta al evangelio de Cristo y la clase de vida que llevan. Sin embargo, la justicia final y precisa no será confrontada hasta que haya concluido todo el curso de la historia. Ni el alcance total del bien y el mal resultantes de cualquier vida llegará a conocerse hasta la eternidad.

PARA SU CONSIDERACION

1.          Según los textos de la Biblia que usted ha leído aquí, ¿quiénes estarán en el juicio final

2.          Si la gente sella su destino aceptando o re­chazando a Cristo, ¿cuál piensa usted que será el propósito de las escenas del juicio descritas

4.        El Cielo

El cielo es el destino eterno de los redimidos-"vida eterna y gloriosa". Nuestra curiosidad nos incita a hacer muchas preguntas acerca del futuro, preguntas que la Pa­labra de Dios no responde. Pero se nos dice bastante para hacernos confiar en que "todo valdrá la pena".

FUENTES BIBLICAS

Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay pleni­tud de gozo; delicias a tu diestra para siempre (Salmos 16:11).

Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo (Juan 17:24).

Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos lla­mados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal co­mo él es (I Juan 3:1-2).

Véase también Salmos 23:6; 73:23-26; Daniel 12:3; Mateo 5:8, 11, 12; 10:41-42; 25:34-40, 46; Juan 14:1-3; Romanos 8:18, 23-25; II Timoteo 4:7-8; I Pedro 1:3-9; 5:4; Apocalipsis 7:9-17; 14:13; 21:1-7,  10-27.

PARA SU CONSIDERACION

1.          Haga una lista de los términos principales em­pleados para describir el estado eterno de los redi­midos.

2.          ¿Está bien decir que puesto que el lenguaje que se emplea para describir el cielo es superlativo, la rea­lidad tendrá que ser por lo menos tan buena como lo que se dice y probable­mente mejor

5.        El Infierno

Lo opuesto al cielo es el infierno. Así como hay tanto que no sabemos acerca del destino de los redimidos, así también es mucho lo que no podemos entender por com­pleto acerca del destino de los que mueran sin arrepentirse. Pero se nos dice lo suficiente como para que nos sirva de amonestación inequívoca contra la incredulidad y el peca­do que conducen a la destrucción.

La palabra "infierno" se emplea para traducir tres términos bíblicos:

a) Sheol en el Antiguo Testamento-término general que se refiere al mundo de los muertos. Se traduce por "sepulcro" o "infierno" en ocasiones casi iguales. Fre­cuentemente no se refiere al infierno eterno como destino final (véase Salmos 16:10).

b) Hades en el Nuevo Testamento-aproximadamente tiene el significado de Sheol en el Antiguo Testa­mento.

c) Gehenna en el Nuevo Testamento; empleada casi exclusivamente por Jesús; describe el estado final de los rebeldes.

FUENTES BIBLICAS

Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el ca­mino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan (Mateo 7:13-14).

¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo escaparéis de la condenación del infierno (Mateo 23:33).

Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda (Apocalipsis 21:8).

Véase también Daniel 12:2; Mateo 5:21-22, 29-30; 10:28; 18:7-9; 25:41-46; Marcos 9:43-48; Romanos 2:5-9; II Tesalonicenses 1:7-9; II Pedro 2:4-11; Apocalipsis 4:9-11; 20:10-15.

PARA SU CONSIDERACION

1. Haga una lista de las palabras que describen la condición eterna de los perdidos.

2. ¿Es correcto decir que puesto que se usa un lenguaje superlativo para referirse al infierno, la rea­lidad será por lo menos como sus palabras lo indi­can y probablemente peor